domingo, 29 de octubre de 2017

Fira de Tots Sants/ All the Saints of Fair



Hoy va ser una entrada mas personal. No voy hablar de mi vida aquí, en EEUU. Me he levantado nostálgica, se acerca la Feria de mi pueblo, Cocentaina, y no voy a estar allí…nos separa mas de 8000 kilómetros de distancia. 

Pensando…es la primera vez desde que nací que me la pierdo. Porque las otras fiestas que se celebran, en algún momento no he estado. Pero la feria es LA FERIA y eso que siempre he trabajado. Primero ayudando en el negocio de mis padres y después en el mío propio, pero aun así he disfrutado de ella, he salido y casi no he dormido para no perdérmela.
Para la gente que nunca ha ido o no sabe que es la Feria de Todos los Santos, voy a intentar explicarlo pero por mucho que os diga, seguro que es mejor. Un pueblo de casi 12000 habitantes, se convierte entero en una Feria. Se celebra desde 1346 y esta declarada de Interés Turístico Nacional.


Echo de menos los días previos a la feria; como nos calentábamos la cabeza para preparar el escaparate de las tiendas, como empezaban a montar las casetas del Passeig y ver las caras de los montadores de todos los años, ver camiones y trailers por las carretera intentando entrar  dentro del pueblo, llevar a los niños al cole y asomarnos al barranco para ver como montan las atracciones infantiles; la noria, los autos de choque, el tren de la bruja, el dragón o el saltamontes. Desde mi casa veía como los feriantes iban llegando con sus caravanas o camiones que por dentro son una casa, y como un puzle iban colocándose hasta hacer un pequeño pueblo en un descampado.

El día de antes es un caos, todo el mundo está nervioso porque quiere montar su stand pero no puede pasar o el del lado le tapa o mil cosas, es difícil caminar por casi ningún sitio, todos van y viene con cajas. Y como por arte de magia todo se va colocando; los tractores primero, los coches milimétricamente colocados, nosotros siempre teníamos delante las motos, más arriba el del vino, las autocaravanas, las puertas de forja, los hornos de cerámica, las estufas de pellets…

Y llega el día, te despiertas y miras por la ventana, ya hay mas coches aparcados que el resto del año, te vistes con tus mejores galas. En feria es fácil distinguir a la gente de fuera y los que somos del pueblo, normalmente la gente viene preparada con buen calzado, de esport y cómodos para caminar, sin embargo nosotros tenemos la costumbre de estrenar ropa para la feria, y vamos monísimos y acabamos destrozándonos los pies pero esto es así y no se puede cambiar. Por mucho que quieras madrugar siempre hay gente que madruga mas que tú, así que cuando llegas al bar para almorzar ya está todo lleno y con mucha paciencia esperas tomarte un café con leche y si tienes suerte, una tostada. Siempre he visto los toros desde detrás de la barrera, veo la feria a mediodía, por la noche o el ultimo día, que hay menos gente. El resto estoy atendiendo a los clientes y mirando la gente pasar.

Cierro los ojos y oigo el murmullo de la gente, subiendo, bajando, con bolsas, gente de todo tipo, de todas las edades, parejas, familias, grupos de amigos, grandes, pequeños… Pasan las horas y sigue pasando gente, no hay fin, entran, salen, preguntan, algunos compran.
Mi padre viene con algún queso, turrón o dátiles, y nos cuenta las novedades de ese año, los amigos pasan a saludar, y van pasando las horas sin darte cuenta. Cerramos un momento y comemos allí, hacemos turnos y ya salimos por las calles a ver la feria. Realmente casi siempre es igual, año tras año sigue viniendo la misma gente a exponer sus productos.

Nosotros siempre hacemos el mismo recorrido, bajamos el Passeig, mirando coches y viendo lo que hay en las casetas y llegamos a los turrones, donde es imposible no comprar. Y a partir de aquí es una locura, todos pegaditos porque esta llenísimo de gente, visitas el Mercado Medieval, hasta el Pla la Font donde están los animales, subes al Pla, ves un espectáculo medieval, o de magia o de acrobacia, entras al Palau y ves las exposiciones. Subes y pasas por el Zoco islámico en la zona del rabal y volvemos otra vez a nuestro trabajo. Allí seguimos saludando, viene gente que solo vemos en feria y es una alegría esos reencuentros.

Por la noche nos vamos a la zona gourmet, donde pruebas vinos y tapas hasta aburrir, quedas con los amigos y cuando los pies ya no pueden más, te vas pensando en todo lo que te queda por ver al día siguiente…

Y así durante tres o cinco días que suele durar la feria, desde el 1 de noviembre hasta el fin de semana mas próximo. Este año no podré estar físicamente… pero soñare con su olor, con sus ruidos, con sus sabores… Así que mando un mensaje a todos mis amigos y conocidos que vayan, que me manden o publiquen imágenes o vídeos de La Feria, para mi será un regalo. Un trozo de mi corazón estará allí.


Disfurteu-la perquè es única. Avant la Fira Tots Sants 2017!!!! 


miércoles, 25 de octubre de 2017

Houston, tenemos un problema!!!


Empiezo con la la famosa frase por la que se conoce "Houston". Fue pronunciada el 13 de abril de 1970, cuando los tres astronautas de la NASA de la misión Apollo 13, dos días después del despegue, se vieron forzados a abandonar sus planes de realizar el tercer alunizaje a la luna.


Nosotros si que cumplimos nuestros planes, y estuvimos tres días Nonstop en Houston. El viernes J tenia fiesta, y decidimos que era el día perfecto para ir al Consulado de España, ya que tienes que ir un día laboral. El consulado de España que mas cerca tenemos es el de Houston, plan perfecto para ir a visitar la ciudad. Tardamos sobre tres horas en llegar, esta a 163 millas, unos 260 km. Salimos a las 6 de la mañana, porque teníamos cita a las 9:00. Allí rellenamos, firmamos todo el papeleo y empezó nuestro gran fin de semana por la ciudad mas grande de Texas, con 2,3 millones de habitantes y 1553 km cuadrados.



Primera parada fue en el Museo de ciencias Naturales, allí pensamos que lo mejor era sacarnos el City Pass, un pase con 5 entradas a las mejores atracciones de Houston, como teníamos claro que queríamos ir a la NASA y la entrada eran 30$ por cabeza. Con el City Pass pagabamos 59$ adultos y 49$ niños, y nos daba para la NASA y cuatro sitios mas, se podía usar durante 9 días, pero nosotros solo teníamos 3. No importó, lo vimos todo, reventados pero no se nos quedó nada por ver.






Museum of Natural Science nos encantó, supongo que para un profesor de naturales debe ser el paraiso. Es uno de los museos más visitados en los Estados Unidos y uno de los más concurridos en Houston, el Museo alberga el Planetario Burke Baker, el Teatro Wortham GIANT, el Centro Cockrell Butterfly y una fascinante variedad de áreas permanentes de exposición que examinan astronomía. , ciencia espacial, cultura nativa americana, paleontología, energía, química, gemas y minerales, conchas marinas, fauna de Texas y mucho más. Además, el museo presenta con frecuencia exposiciones itinerantes sobre una variedad de temas. Nos impactaron los dinosaurios a tamaño real.







Después de disfrutar del museo, comimos en el parque Sam Houston,precioso, con una ladera y un lago, muy bien cuidado. Y vimos pinos, muy típicos donde vivimos en España.
Al lado del parque esta el Zoo de Houston, también podiamos entrar  con el City Pass. Es muy grande y bien cuidado, aunque nosotros no somos muy de Zoos, había animales realmente aburridos de estar en cautiverio, pero al mismo tiempo también conocimos animales que nunca habíamos visto. Los que mas me impresionan son los gorilas, tan parecidos a nosotros en sus gestos.








Nuestra siguiente parada fue en busca del hotel, que había reservado con antelación hacia una semana. Cuando llegamos al hotel...los cinco, nos miramos y dijimos; "Houston, tenemos un problema". El hotel no era lo que esperábamos, parecía que estaba en obras, en la recepción nos dieron la llave de la habitación, pensando que la habitación se salvaría. Las habitaciones se dividían en dos plantas y daban a la calle, exactamente igual que como habíamos visto en películas (de miedo). La habitación era pequeña con dos camas de matrimonio y un diminuto baño, que solo cabía una persona, aunque lo peor era el olor. Volvimos a recepción, nos explicaron que estaba así por el huracán. Como teníamos el desayuno incluido y el hotel dijo que no ofrecía, pudimos cancelar la reserva y buscar otro hotel. Finalmente, encontramos un hotel, con el mismo precio, pero con espacio para los cinco, limpio y con desayuno, perfecto.











Al día siguiente, visitamos la Nasa Space Center Houston, desde la entrada ya es todo impresionante. Tiene más de 400 artefactos espaciales, exhibiciones, simuladores. Puedes ver un cohete por dentro, hay charlas de aereonautas a quien  les puedes preguntar cosas, los trajes que se utilizaban y los actuales. En un trenecito te llevan a una nave, donde trabajan con simuladores donde ves cohetes o artefactos espaciales, robots. En otra nave, ves una replica de un cohete que se utilizó para llegar a la luna y una exposición de todos los alunizajes que se han hecho. Puedes tocar un trozo de piedra de la luna. Es un sitio totalmente recomendable. 







Comimos allí y después nos fuimos a un parque de atracciones frente al mar, que esta cerca de la Nasa, KemanBoardwalk, entramos con el City Pass y subimos a todo lo que nos dio tiempo. Dimos una vuelta por el muelle. Como aun nos quedaba energía, para rematar el día, fuimos a cenar a The Galleria, un centro comercial con una pista de patinaje de hielo dentro y con tiendas fuera del alcance de nuestros bolsillos. 



El domingo amaneció lloviendo, nos quedaba por ver el Aquarium y  Downtown. En el Aquarium solo estaba abierto el edificio central, donde esta el acuario, y también se pueden ver tigres de Bengala. Hay una atracción donde tocas rayas y les puedes dar de comer. El exterior estaba cerrado por la lluvia, donde hay atracciones. Seguramente este sitio fue el que menos nos impresionó, ya que en el Zoo, tienen un aquario grande y el día no acompañaba mucho. Lo hicimos rápido y nos fuimos al Downtown, el centro de Houston, donde están los rascacielos. Allí nos hicimos la típica foto de la fachada, el tiempo nos dio una tregua y pudimos dar una vuelta por Main Street. Por la tarde ya fue la vuelta a Austin,, reventados pero contentos de ver y disfrutar de esta gran ciudad. 
See you!






miércoles, 18 de octubre de 2017

Pedernales Park, Cementerio y Bullock Museum


Los fines de semana siguen siendo ajetreados, os cuento algunas cosas que hicimos estos dos fines de semana pasados. El pasado viernes tuvimos cumple de un amigo. El grupo de profesores, que vino a este distrito de Austin, es nuestra familia aquí, en poco tiempo han pasado de desconocidos a amigos. Y es que, nos ha tocado vivir mil historias en este país. Todos nos hemos montado la vida aquí y la ayuda entre todos ha sido fundamental. Así que los viernes o los sábados es sagrado quedar y contarnos las batallitas que nos van pasando.

El pasado sábado disfrutamos de la piscina, hace mucha calor y es lo que mas apetece. Por la tarde, dimos una vuelta por el centro de Austin, pasamos por delante del mítico Hotel Driskill. Ubicado en Sixth Street, en el corazón del centro de la ciudad, es un lujoso hotel histórico , de estilo románico. Fue concebido y construido por el coronel Jesse Driskill , un ganadero que gastó su fortuna en la construcción en 1886.



Para el domingo nos recomendaron ir a Pedernales Falls State Park, es un parque estatal de Texas. Decidimos sacarnos el carnet de los parques estatales, por 70$ tienes la entrada durante un año a todos los parques de Texas. Nosotros seguro que lo amortizamos.





Pedernales esta a 30 millas al oeste de Austin, el río pedernales fluye sobre enormes losas de piedra caliza y se forman unas pequeñas cataratas, en esa zona estaba prohibido el baño, pero un poco mas abajo del río si que esta permitido. Hay una zona de picnic y de acampada. Hay un video cortito donde se puede ver el parque.




Pasamos un día estupendo, comimos de picnic y nos bañamos en el río, no había mucha gente y estuvimos de lo mas relajados.

Este sábado, tuvimos cumpleaños de un compañero de clase de M, era nuestro primer cumple americano. Aquí todos los acontecimientos tienen hora de empezar (es normal, claro) y curiosamente hora de terminar. Si vas a una reunión te dicen de 6:00 pm a 6:45 pm, por ejemplo. Y para un cumpleaños,también. Era de 12:45 am a 3:00 pm, no sabíamos si era comida, merienda...Fue en Austin Paintball, jugaron una partida disparándose bolas de pintura. Ilusa de mi, creía que le darían ropa para jugar, pero solo daban la mascara y la pistola. Menos mal que solo quiso jugar la primera parte, el pobre no tenia mucha fuerza recargando la pistola y solo recibió bolas y no pudo disparar casi ninguna. Creo que el juego era para mas edad, con 6 años es complicado, aunque el cumpleañero estaba encantado. Les dieron pizza, zumos y una tarta, personalizada con el paintball. A mi me sirvió para relacionarme con algunas madres, como M acude al colegio en  autobús, no conocía a ninguna. 
Ya por la noche, tuvimos cena con nuestra familia española, y recargamos pilas.



El domingo visitamos el State Cementary Texas, aunque no suena muy feliz y no somos de visitar cementerios, es un lugar muy interesante y está implecablemente cuidado. Muchas personas famosas de la Historia de Texas están enterrados aquí.Hay guías que te pueden explicar quienes están enterrados, pero nosotros fuimos por libre.


Después fuimos al Bullock Museum, es un museo  que narra con distintas exposiciones y salas la historia de Texas. Nosotros visitamos una exposición de videojuegos, desde el mas antiguo hasta hoy en día. Mis hijos H y M disfrutaron de lo lindo, ya que se podía interactuar y jugar en casi todos.







El próximo fin de semana nos vamos a Houston!! See you!!